El mito de Osiris

En un tiempo en que Osiris gobernaba Egipto con justicia. Su hermano Seth le odiaba, ansiando su poder y popularidad. Durante uno de los viajes de Osiris, Seth confabuló junto con la reina Kush de Etiopía. En secreto, obtuvo las medidas del cuerpo de Osiris y fabricó un cofre, ricamente adornado. Tras el regreso de Osiris, Seth dio un gran banquete en honor a su hermano.

En un momento dado, Seth enseñando el cofre y dijo: "Daré este cofre a aquel que encaje perfectamente en él". Los invitados lo probaron uno a uno, pero ninguno lo obtuvo. Osiris, maravillado por la grandeza del oro y las pinturas que lo adornaban, lo probó. Y viendo que encajaba afirmó: "Encajo y será mío", a lo que Seth respondió "Tuyo es, hermano. Y lo será para siempre", cerró la tapa bruscamente y lo selló con plomo fundido. El cofre fue transportado hasta el Nilo donde Hapi, el dios del Nilo, lo arrastró hasta la costa de Fenicia.

Isis, cuando se enteró de la traición, partió en busca del cuerpo de Osiris. Tras una larga búsqueda lo encontró y regresó a Egipto. A su llegada, escondió el cofre en los pantanos del Delta. Con tan mala fortuna que una noche Seth, que se encontraba cazando jabalíes, lo encontró. Encolerizado, tomó el cuerpo de Osiris y lo despedazó en 14 trozos que esparció por el Nilo para que sirviese de alimento a los cocodrilos.

Poco a poco Isis con la ayuda de su hermana Neftis, esposa del mismo Seth, fue recuperando cada uno de los trozos del cuerpo. Que envolvió en cera y entregó a los sacerdotes del lugar. Obligándoles a jurar que le darían sepultura y venerarían. Sólo un pedazo quedó por recuperar, el miembro viril. Isis reconstruyó el cuerpo y con su magia asemejó el miembro perdido, consagrando así el falo. A continuación, Isis fue fecundada por el cuerpo de Osiris haciéndola madre de Horus.

Osiris escogió entonces irse al mundo subterráneo y convertirse en el dios de los muertos. Isis, por contra, se refugió en el Delta. Allí tuvo a su hijo y lo protegió de Seth hasta que fue adulto. Entonces Horus, incitado por Osiris, comenzó un sinfín de luchas contra Seth. Que no tuvieron fin hasta que ambos fueron llamados al tribunal de los dioses. Que falló a favor de Horus. Le designó sucesor de su padre y faraón de todo Egipto. Mientras que Seth fue llamado por Ra y permaneció junto a él como su hijo para siempre.